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Foto del escritorJosé Miguel Guevara

2023, año de definiciones

De corazón deseo gracia y bendiciones en este año 2023 para todo mundo, somos

hermanos todos.


Foto: Freepik

Del tema que nos tenía atentos, ahora ya conocemos el resultado, Norma Piña presidirá la Suprema Corte.


No recuerdo que la elección de presidente de la Suprema Corte llamara tanto la atención antes de esta ocasión, situación comprensible dado las actitudes controladoras que el ejecutivo ha venido mostrando en los años que lleva gobernando. Todo indicaba que aspiraba a tener ascendencia sobre el Poder Judicial.


Bien, dado los resultados de la última ronda para la elección de presidente de la Suprema Corte de Justicia pudo leerse una división de opiniones expresada en votos, cinco a seis, y una selección mucho mejor de la que llegó a temerse, la Jueza Norma Piña Hernández tiene carrera y experiencia en el Poder Judicial.


La prensa nos ha ofrecido abundantes datos de su carrera profesional, así como de su desempeño en el Poder Judicial. Licenciatura en Derecho de la UNAM, más de veinte años en de desempeño en ese poder, línea clara de pensamiento liberal mostrado en sus votaciones en diferentes temas; se reporta que en la mayoría de las ocasiones en que la corte ha resuelto temas de relevancia para el partido dominante, la ministra con total independencia ha votado en contra en un ochenta por ciento de las ocasiones.


Por los comentarios expresados en relación con su elección, puede conjeturarse que no era la opción deseada por el Poder Ejecutivo. Este resultado puede considerarse uno más de los tropiezos que ese poder ha tenido a últimas fechas. Esas contrariedades provocan, por un lado, reacciones viscerales del presidente y por otro muestran que, sin importar sus posiciones, no tiene asegurado un gobierno de continuidad, con responsabilidad y valor civil puede avanzarse por otra ruta.


Iniciamos este año de definiciones con señales que para muchos nos resultan gratas.


Desde el pasado jueves 5 ha dominado los noticieros la captura de Ovidio Guzmán, el mismo líder criminal que en 2019 fue liberado por instrucciones del presidente después de que había sido capturado.


Por supuesto que el operativo y las reacciones de la red criminal que lidera este hombre, tiroteos como en Beirut, son de llamar la atención. Se tuvo que cerrar los aeropuertos de Culiacán, de Hermosillo y dado el movimiento de las naves del la Fuerza Aérea Mexicana, también se cerró por un tiempo el aeropuerto de la Ciudad de México.


Entre los muchos comentarios a las noticias dos son particularmente interesantes: uno el que hacía notar la captura justo en forma previa a la visita de los mandatarios norteamericano, Joe Biden y canadiense, Justin Trudeau a México. El otro, si en verdad el presidente tiene algún acuerdo con la familia de Ovidio, ¿qué sucederá después de su detención? Solamente faltó que se mostraran nuevamente las fotos de la ocasión en el presidente en una visita a Sinaloa “pasó a saludar” a la abuela del ahora capturado.


En verdad que quedamos en espera de sorpresas.


Por otro lado, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ha instruido a los diputados que deben corregir y modificar la convocatoria para elegir a los consejeros que reemplacen a los cuatro que saldrán del Instituto Nacional Electoral, para eliminar la obligación que impuso la Cámara Baja al comité de evaluación de presentar dos informes sobre los perfiles de los aspirantes mejor calificados. El Congreso hará la corrección en febrero.


En el entorno internacional me parece que el suceso relevante ha sido el fallecimiento del Papa emérito Benedicto XVI, Joseph Ratzinger a sus 95 años. Fallecimiento esperado, pero profundamente sentido.


Con su partida a la Casa del Padre, la humanidad pierde a uno de los hombres más brillantes de la actualidad, no solamente por su profundidad en teología, verdadero moderno Doctor de la Iglesia, también por su calidad humana.


Sus tres años como arzobispo de Múnich y a continuación su presencia en el Vaticano a petición del también extraordinario San Juan Pablo II, reorientaron su carrera de catedrático valioso en el circuito de las universidades importantes de Alemania, para aportar su sabiduría en el dicasterio más importante y finalmente en la conducción de la Iglesia como Sumo Pontífice.


Nos lega un tesoro en sus escritos y conferencias. Ahora cuidará a la Iglesia e intercederá por nosotros directamente ante el Creador.



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